AUTOSCOUT24. 22.08.2009 - 21.58 h
A bordo del BMW 760 Li uno se siente como su mismísima majestad, y no sólo en la parte de atrás. Sólo con saber que su motor de doce cilindros supera con creces los 500 CV y los 700 Nm, y que el habitáculo del conductor está perfectamente equipado hace que un temblor recorra todos nuestros músculos nada más arrancar el motor, también en la parte de atrás.
El BMW 760 Li posee un sistema de accesorios de sonido, TV e Internet muy completo
Si uno consigue no sucumbir al confort de este coche de lujo, podrá divertirse con gran variedad de "accesorios", como por ejemplo el sistema opcional de mandos i-Drive secundario.
Desde aquí, como un rey, uno puede manejar todas las funciones del i-Drive principal, entre las que cabe mencionar: elsistema de navegación (con perspectiva fotográfica de Google Maps), equipo de sonido, TV, Internet; todo se puede controlar y cambiar desde atrás, siempre que el conductor haya desbloqueado esta opción. Si no, los accesorios se limitan a las dos enormes pantallas instaladas en los asientos delanteros.
Desde el punto de vista del conductor, la cosa cambia completamente. Porque junto a sus cualidades "choferescas", del 760 Li se espera también un comportamiento de berlina deportiva superveloz, de ahí que los ocupantes de los asientos traseros no siempre estén satisfechos, al menos en lo que a confort de suspensión se refiere. De hecho, este coche, con sus dos toneladas, ofrece el mejor equilibrio entre confort y deportividad que podemos encontrar en el segmento de los automóviles de lujo.
Ocho velocidades
Gracias a su caja de cambios automática de ocho velocidades (que también equipará próximamente el pequeño Rolls Royce), el BMW pasa de una marcha a otra de forma rápida, cómoda e impecable. Esta caja, que ha sido desarrollada en colaboración con ZF, está basada en peso y tamaño en la de seis marchas de su predecesor, pero gracias a las dos relaciones adicionales es capaz de gestionar más eficientemente la potencia entregada por el motor, aumentando así las prestaciones ydisminuyendo el consumo. Según BMW, esta nueva caja es capaz de ahorrar alrededor de un litro.
La octava marcha entra ya a los 80 km/h si la velocidad es constante, y si viajamos a máxima velocidad, el cuentarrevoluciones no supera las 3500 vueltas. El bloqueo de convertidor de par sólo entra en acción en primera, de forma que el cambio es siempre directo, lo que evita un aumento forzado de vueltas (y del consumo de combustible). Entre las ocho marchas es fácil encontrar la adecuada para cada momento.
La octava marcha entra ya a los 80 km/h
Al propietario de este
coche de altostanding no le interesa el tema del consumo, al menos en lo económico, ya que quien puede gastarse 150 000 euros en un BMW 760 Li tiene otras preocupaciones en la vida. Por suerte, tampoco tendrá que preocuparse por el equipamiento de su juguete (porque eso es lo que es un 760 Li), ya que el tope de gama lleva también el tope de equipamiento por el precio tope. Por supuesto, tiene a su disposición infinidad de opciones de personalización para las que el único límite es el del buen gusto.
El 760 es totalmente superfluo e innecesario, pero también, de alguna manera, fascinante; se trata del paradigma del coche de lujo de nuestro tiempo, pero no se puede encontrar una explicación racional para la existencia de este doce cilindros. Un
750 Li no es peor, subjetivamente hablando, cuesta unos 30 000 euros menos con un equipamiento equivalente y consume 1,6 l menos. Lo que le falta al ocho cilindros es el prestigio que da
un motor V12, que sigue siendo un símbolo de estatus mundialmente reconocido en el sector del automóvil. Hasta la fecha, el 23% de los doce cilindros marca BMW van a parar a EE UU, otro tanto a China y sólo el 15% se quedan en Alemania.